Transferencia de tecnología genera renta también para otros productores.
El éxito del Grupo Paraná Wood (GPW) comenzó con el plantar de las propias forestas. El crecimiento del grupo, los últimos 14 años, se debe principalmente a la visión de su propietario, el médico João Luiz Garcia de Faria, que decidió llevar para el campo procesos de gestión e invertir en el Agro. Con la colaboración de Douglas Mendes – que comenzó a trabajar con forestas aún niño – y Dalço dos Santos, que tiene una vida dedicada a la ganadería y agricultura, procesos y metodologías personalizadas, el trio viene innovando en Paraná.
De un área inicial de 200 hectáreas plantados con eucaliptos en la región de São Jerônimo da Serra, al norte de Paraná, el grupo suma hoy 1.460 hectáreas de forestas propias. Toda esa área es dividida en lotes, con plantación, manejo y tecnologías empleadas de forma personalizada en cada lote. Mudas de alta calidad de Eucapinus, cosecha mecanizada, corte, remoción y transporte para la maderera realizados con el grupo y equipos propios, garantiza producción auto sustentable y de alto lucro. Con integración y manejo adecuado, fertilización, tecnología y habilidades de sus trabajadores, mantienen una producción mediana de 65 metros cúbicos por hectárea/año, muy sobre el promedio nacional de 36 metros cúbicos hectárea/año.
Los procesos pueden ser transferidos, generando renta también para otros propietarios de tierra. “El GPW trabaja con asociaciones, personas que tienen tierras, pero están insatisfechas con sus ganancias. Las personas llevan para ellos una metodología donde consiguen tener un lucro mucho mayor acoplado a una gran empresa que quedarse trabajando solos”, explica Garcia de Faria.
Eso economiza costos porque la infraestructura necesaria para cosechar la madera es cara. “Se necesitan camiones, tractores, equipos. No son todos los que tienen condiciones de hacer un negocio de alto rendimiento, de precisión. Se necesitan asociados. El productor, a veces, tiene un tractor muy pequeño dentro de su área y no tiene condiciones de adquirir los equipos esenciales”, dice. Las asociaciones son realizadas de forma individualizada, todo depende del interés del propietario del área a ser explorada. “Puede ser por arrendamiento, por asociaciones, por participación en el lucro final”, explica el médico empresario. Además de eso, el GPW todavía trabaja con equipo propio, ofreciendo recurso humano altamente especializado.